Visto el triunfo enorme de Cristina en el país, ahora hay que ver qué rumbo toma la oposición, qué van a hacer los medios asociados en la lucha sucia por destruir a Cristina (Nación y Clarín) para evitar lo que se les viene con los juicios por Papel Prensa a los dos, y a Clarín por la obligación de vender los medios que le sobran según la ley de Medios, cuando la Corte apruebe la cláusula de desinversión apelada.
A mi entender sólo les queda rezarle a un Santo. San Ballotage. Para que consiga que uno de los tres matungos que cabeza a cabeza quedaron a muchos cuerpos de Cristina, alcance en la elección de octubre una distancia cercana en lo justo para entrar en el ballotage. El que se va a ocupar de eso es fundamentalmente TN, porque LN no tiene canal de TV. Y Nación va a hacer lo suyo mediante el diario.
Mi pronóstico, que no ha de ser nada original, es que a Magnetto sólo le queda apoyar a Binner. Darle cartel todo el tiempo hasta octubre hasta instalarlo en el último rincón de cada casa del país. Lo va a meter hasta en la sopa. Eso es lo que creo. ¿Por qué Binner? ¿Por qué no Alfonsín o Duhalde?
Alfonsín no, porque se fue a pique. Porque perdió el único "capital" con el que contaba , que viene de un partido importante y tradicional como la UCR, y si no consiguió más votos que los otros dos, es porque el rechazo de los radicales es absoluto y nada lo va a cambiar. Alfonsín destruyó lo único que le daba sustento, el afiliado radical y el votante adulto republicano nostalgioso de su padre Raúl, al que recuerda recitando el preámbulo como metáfora de lo institucional y enfrentando culturalmente (gorilamente, sea dicho) a los peronistas del cajón incendiado, a la vez que acusando al pacto militar sindical, con lo que se metía en la bolsa tanto a los militares como a los sindicatos peronistas. Tal vez lo único que recuerde el adulto joven de hoy es haber imitado el saludo de Alfonsín cuando era chico. Pero este Alfonsín, el huérfano, se metió con de Narváez y reculó de los principios de su padre. Sea como sea, a Alfonsín el huérfano los radicales no lo votaron. ¿A qué apoyar entonces a un caído?
De los otros dos, Duhalde es la rémora del pasado menemista, complicado con las muertes de Kostecki y Santillán, con un discurso que apela a lo más profundo de la derecha militarista y procesista, exaltadora de Videla. Duhalde tuvo los votos que pudo tener y ni uno más va a poder tener. Nadie lo quiere. No se puede apostar a Duhalde. Menos un diario que se las da de progresista. Menos un diario que no querrá verse mezclado otra vez con el que protegió desde un título que todos recuerdan y Magnetto deseará que se entierre: La crisis causó dos nuevos muertos.
Sólo queda Binner. Ese es el milagro, no Altamira. Subió por sus propios medios y suerte a candidato a presidente. Se instaló y logró ser votado viniendo de la nada en el orden nacional. En el 2001 andaba tras los pasos de Carrió mendigando algún lugar en el Ari, mientras el deambular demente de la chaqueña delirante lo mareó hasta el punto de buscar rumbos más provincianos.
Binner es la única apuesta posible que le queda a Magnetto. Casi nada, pero es lo que hay.
A Magnetto sólo le queda mandar a todo su batallón de periodistas soldados a instalar a Binner en el término de dos meses, de tal manera que lo tengamos hasta en la sopa. Veremos si se cumple esta predicción que me atrevo a hacer la noche misma de la exitosa elección primaria donde Cristina se alza como triunfadora absoluta de las próximas elecciones de octubre, y sigue en el ruedo por cuatro años, para terminar con muchos asuntos inconclusos y dejar un pais nuevo y vivible para todos.
La otra que les queda es batallar feo y grande para destruir la imagen de un gobierno exitoso. Es posible. ¿Con ayuda internacional? ¿Les alcanzará el tiempo? No creo. Pero igual la batalla será feroz desde los medios durante el próximo mandato de Cristina. Y hay que reacomodar las piezas del rompecabezas. Alfonsín se tiene que ir. Seguro que Stolbizer vuelve al Partido Radical y la ponen de presidenta del partido. Desde ahí hace una alianza con Binner y con lo que queda de la CC de Carrió y forman bloque en el Congreso. También se tienen que juntar Duhalde con de Narváez y formar otro bloque que luego se una a Macri para las presidenciales del 2015.
Pero en 2015 vamos a tener a un Scioli, a un Boudou, tal vez a un Massa, y también a un Rossi compitiendo por las presidenciales. Quién se va a quedar con el sello justicialista será la gran incógnita. Seguro que es Scioli. Los demás irán por afuera. Veremos. Ahora viene Octubre. Pronto.
A mi entender sólo les queda rezarle a un Santo. San Ballotage. Para que consiga que uno de los tres matungos que cabeza a cabeza quedaron a muchos cuerpos de Cristina, alcance en la elección de octubre una distancia cercana en lo justo para entrar en el ballotage. El que se va a ocupar de eso es fundamentalmente TN, porque LN no tiene canal de TV. Y Nación va a hacer lo suyo mediante el diario.
Mi pronóstico, que no ha de ser nada original, es que a Magnetto sólo le queda apoyar a Binner. Darle cartel todo el tiempo hasta octubre hasta instalarlo en el último rincón de cada casa del país. Lo va a meter hasta en la sopa. Eso es lo que creo. ¿Por qué Binner? ¿Por qué no Alfonsín o Duhalde?
Alfonsín no, porque se fue a pique. Porque perdió el único "capital" con el que contaba , que viene de un partido importante y tradicional como la UCR, y si no consiguió más votos que los otros dos, es porque el rechazo de los radicales es absoluto y nada lo va a cambiar. Alfonsín destruyó lo único que le daba sustento, el afiliado radical y el votante adulto republicano nostalgioso de su padre Raúl, al que recuerda recitando el preámbulo como metáfora de lo institucional y enfrentando culturalmente (gorilamente, sea dicho) a los peronistas del cajón incendiado, a la vez que acusando al pacto militar sindical, con lo que se metía en la bolsa tanto a los militares como a los sindicatos peronistas. Tal vez lo único que recuerde el adulto joven de hoy es haber imitado el saludo de Alfonsín cuando era chico. Pero este Alfonsín, el huérfano, se metió con de Narváez y reculó de los principios de su padre. Sea como sea, a Alfonsín el huérfano los radicales no lo votaron. ¿A qué apoyar entonces a un caído?
De los otros dos, Duhalde es la rémora del pasado menemista, complicado con las muertes de Kostecki y Santillán, con un discurso que apela a lo más profundo de la derecha militarista y procesista, exaltadora de Videla. Duhalde tuvo los votos que pudo tener y ni uno más va a poder tener. Nadie lo quiere. No se puede apostar a Duhalde. Menos un diario que se las da de progresista. Menos un diario que no querrá verse mezclado otra vez con el que protegió desde un título que todos recuerdan y Magnetto deseará que se entierre: La crisis causó dos nuevos muertos.
Sólo queda Binner. Ese es el milagro, no Altamira. Subió por sus propios medios y suerte a candidato a presidente. Se instaló y logró ser votado viniendo de la nada en el orden nacional. En el 2001 andaba tras los pasos de Carrió mendigando algún lugar en el Ari, mientras el deambular demente de la chaqueña delirante lo mareó hasta el punto de buscar rumbos más provincianos.
Binner es la única apuesta posible que le queda a Magnetto. Casi nada, pero es lo que hay.
A Magnetto sólo le queda mandar a todo su batallón de periodistas soldados a instalar a Binner en el término de dos meses, de tal manera que lo tengamos hasta en la sopa. Veremos si se cumple esta predicción que me atrevo a hacer la noche misma de la exitosa elección primaria donde Cristina se alza como triunfadora absoluta de las próximas elecciones de octubre, y sigue en el ruedo por cuatro años, para terminar con muchos asuntos inconclusos y dejar un pais nuevo y vivible para todos.
La otra que les queda es batallar feo y grande para destruir la imagen de un gobierno exitoso. Es posible. ¿Con ayuda internacional? ¿Les alcanzará el tiempo? No creo. Pero igual la batalla será feroz desde los medios durante el próximo mandato de Cristina. Y hay que reacomodar las piezas del rompecabezas. Alfonsín se tiene que ir. Seguro que Stolbizer vuelve al Partido Radical y la ponen de presidenta del partido. Desde ahí hace una alianza con Binner y con lo que queda de la CC de Carrió y forman bloque en el Congreso. También se tienen que juntar Duhalde con de Narváez y formar otro bloque que luego se una a Macri para las presidenciales del 2015.
Pero en 2015 vamos a tener a un Scioli, a un Boudou, tal vez a un Massa, y también a un Rossi compitiendo por las presidenciales. Quién se va a quedar con el sello justicialista será la gran incógnita. Seguro que es Scioli. Los demás irán por afuera. Veremos. Ahora viene Octubre. Pronto.