Se puede pasar por esta vida sin haber tenido plata, pero es una verdadera picardía morirse sin haber conocido a Beethoven. ¿Y por qué Beethoven y no otro? ¿Qué significa haber "conocido" a Beethoven?
Digo conocer, porque no alcanza con haberlo escuchado alguna vez. A este hombre hay que conocerlo, penetrar en sus dominios, entrar en su discurso musical, que es suyo y ùnico, sin comparaciòn con ningùn otro. Todos los demàs se parecen entre sì aunque sean muy diferentes. Pero Beethoven no se parece a nadie. Y después de él, todos se le parecen un poco a él, porque no podìa ser de otro modo.
Hay decenas de músicos maravillosos, Tchaikovsky, Brahms, Mahler, y antes Mozart, que tambièn supera en genialidad a todos los posteriores pero se queda abajo mirando a Beethoven, suerte que no lo llegò a ver triunfar, porque se muriò antes, y hubiera sido duro para Mozart conocer a alguien que lo superaba, siendo el genio que fue. Beethoven, sin embargo, es el monte Everest de la música.
Si se lo ha oído y uno no se ha quedado prendado de este particular ser humano, enganchado de tal forma, que a uno le es indispensable escuchar más, y luego continuar con más obras, hasta conocer la mayor parte de su obra, que en definitiva no es tanta, entonces, no se tuvo la oportunidad de escuchar bien, porque se estaba pensando en otra cosa, o no se estaba motivado, o vaya saber por què. Pero si uno tuvo ese instante de contacto, que es como cuando un pez muerde el anzuelo, entonces, puede ser que se llegue a pensar como Arthur Rubinstein, el màs grande pianista que existió, que dijo: no concibo la "humanidad" sin Beethoven.
Pero ¿de verdad es así? Sí, es así. Para los que hemos penetrado su territorio palmo a palmo, es como si supièramos dónde está enterrado uno de los más grandes tesoros.
Se puede empezar por cualquier lado, pero conviene empezar por la 5ª sinfonía. La Quinta, como se la llama familiarmente, se puede escuchar varias veces en un juego meramente gozoso, pero en algùn momento la Quinta te hace el click. Mordiste el anzuelo. Ese click te vincula con Beethoven. Despuès hay que pasar a la 7ª. Y otra vez, escuchar varias veces. Uno va ya esperando lo que sigue, y empieza a entender su discurso, su idioma, su narrativa, su pintura, su temperamento, su estallido revolucionario, su dominio de sì mismo, su integridad, su honestidad. Todo eso, aunque no lo creas, se escucha en su obra.
Después pasás a la 9ª, La Novena, ¿quièn no conoce la Oda a la Alegría de la Novena Sinfonìa?. Vos la conocès, aunque no sepas como se llama. Es la parte coral final de la Novena. Es una obra colosal, es la gran Sinfonìa de todos los tiempos.
Mirá, Beethoven hizo nueve sinfonías, de las cuales la 7 y la 9 son para mí las mejores, especialmente la 7, para mí, eso es personal. También te van a gustar las otras. Las primeras dos hacen roncha en su época, pero todavía tienen mucha influencia de Mozart y Haydn. La tercera, la Heròica, se la hace en honor a Napoleón, por haber luchado contra los privilegios de la aristocracia, (y eso que el tipo trabajaba para los ricos) pero cuando se entera que Napolèon se hizo coronar Emperador, le tachò la dedicatoria enfurecido. Con esta obra nace de verdad Beethoven.
Con esta obra nace un nuevo perìodo de la mùsica. El primer y último gran perìodo de la mùsica. Beethoven es un renovador, un innovador, un genio absoluto que deja asombrados a todos los de su época porque nada habìa sido antes como es la Heròica. Nace con ella el romanticismo. Nacen las pinturas de escenas, bucòlicas, de caza, batallas, cañones, salvas, marchas fùnebres, relatos, climas de suspenso, calmas que preceden a las tormentas, siestas de faunos, pájaros en los bosques, cuentos de ogros, viajes al Nuevo Mundo, y pasiòn por los acontecimientos políticos de la época.
Lo que estás escuchando es una cosa muy especial (buscálo abajo, en un gadget). Es el segundo movimiento de tres, del concierto para piano y orquesta No 5, que tiene un seudónimo puesto por un muchacho soldado francés, que después de oirlo le gritò a Beethoven frente a todo el mundo: "el Emperador sos vos", y le quedó el apodo al concierto. El concierto se llama "El Emperador". Bueno, es algo muy serio este movimiento.
Imaginate una escena: Alguien tiene que hacer una confesiòn tremenda a otra persona. Puede ser un padre que le cuenta a su hija una historia que le habìa ocultado. Imaginate que le convence delicadamente que se siente y lo escuche porque tiene algo que contarle. Toda esa parte es lo que escuchás de la orquesta pura, que es al principio. Cuando la hija accede a sentarse en silencio porque va a escuchar algo grave, comienza el piano a relatar lo que relata el padre. La orquesta va expresar las emociones de la hija mientras se va enterando de cosas que no imaginaba, y el piano refleja en la voz del padre la repercusiòn que su relato va teniendo en la hija. El sigue, impertérrito, rìtmico, de pronto pasea en silencio, y continùa. Asì hasta el final del movimiento.