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12 de noviembre de 2008

La casita alpina


Las vacaciones no formaron parte de mi vida los úlitmos 38 años. La última vez que me fui de vacaciones en serio fue en 1976. Justo es decir que viajé mucho y lo pasè muy bien hasta ese año. Por cosas de la vida, cosas y cosas y cosas, nunca pude hasta este verano pasado, decir bueno, me voy de vacaciones. Salí sí, pero por pocos dìas, invitada a casa de amigos, pero no al lugar que yo eligiera, ni cuando yo quisiera. Y además, la verdad era que no tenía ganas.

Ir de vacaciones para mí no es ir a un hotel. No soporto los hoteles. El año 2007 por fin, se consolidó la situación comercial de mi actividad tan especialmente diezmada por el gobierno de Menem, y enterrada en el 2001.

Una vez que por fin después de tantos años, pude decir "ahora estoy tranquila", en febrero de 2008 me alquilé una cabaña alpina en una pequeña quinta de una manzana cuadrada, en Pilar, con una hermosa pileta. Y pasé con mi marido diez días de pelìcula. Leyendo, cocinando, mirando el espectáculo del amanecer y el de los pajaritos piando, sentándome en la galería a tomar café por la noche, oyendo el canto de los grillos, el silencio, y mirando la majestad de los pinos centenarios y oliendo a bosque...

Volvimos a casa el primer domingo de marzo, en que Buenos Aires se inundó por una tormenta, pero llegamos diez minutos antes de que se largara lo peor de la lluvia. Volver fue maravilloso. Mi departamento me pareció hermoso. Me acomodé con todas las fuerzas para continuar el trabajo que prometía esta vez por fin, progreso y estabilidad. Kirchner Nèstor y Kirchner Cristina habìan hecho el milagro. Empezar la primera semana de marzo, otra vez en carrera por la vida, esa era mi alegría más grande.

Abrí la óptica al otro día, lunes. El Once bullía, como todo ese verano, de micros que venían del interior. No había cuadra sin esas moles de dos pisos, o las combies en las que vienen grupos.Los compatriotas provincianos parecen querer comprarse todo. Todo viento en popa, todo en orden...hasta que empezó el conflicto con el campo.

El negocio se fue de repente al tacho. El Once se fue quedando vacío. Los micros dejaron de venir. Mes a mes, esos cuatro meses, la cosa se agravaba. A los dos meses ya empezaban a cerrar negocios. En enero no habìa local vació en alquiler. En mayo aparecìan los carteles "se alquila". En enero habìa cartelitos buscando empleado con experiencia por todos lados. En mayo no habìa más carteles. Yo no lo podía soportar.

No podía ser que por fin hubiera habido un gobierno gracias el cual yo habìa mejorado, y me habìa dado la opción de prosperar, y que otra vez me encontrara con el pánico del futuro, con el quebradero de cabeza que es el sentir que se cae todo lo que creías en pie. Pero esta vez era injusto. La culpa no era del gobierno. Durante cinco años se habían hecho las cosas mejor que en los cuarenta años que tengo de actividad. No era justo.

Todo terminó la noche nefasta en que el Cleto votó no positivo. Era el fin del mundo para mí. Yo lo ví en directo, esa noche permanecí despierta, y lo ví al mendocino estirar el final dramático hasta hacerlo insoportable.

Es increíble, pero a pesar de todo lo que pasó, la situación del comercio fue remontando. Los precios se fueron a las nubes, pero ya tocando fin de año, ha vuelto la efervescencia. Hoy fue un dìa muy bueno. Y ya hace dos meses que la cosa aumenta sostenidamente día a día. No entiendo cómo sucedió. Hay plata en la calle. La gente compra, y compra. Es cierto que los micros no vienen en la cantidad que venían. Parece que el campo se jorobó màs que nadie con el paro.

Si sigue la cosa así, voy a volver a alquilar la cabaña alpina este verano, me quedò el recuerdo de esos dìas felices, como los de Cenicienta. Pero me despierto del sueño cuando pienso en eso. Recuerdo que estamos suspendidos en el tiempo, esperando que se vote en el Senado la estatización de las jubilaciones. Y tengo miedo que algo pase y que no salga, como ocurrió la otra vez con Cleto. Esta vez se atacó a los Bancos. ¿Será que vayan a perder alguna vez?

La vez pasada festejé cuando ganamos en Diputados. Esta vez me callé la boca y me puse a esperar. La experiencia se acumula. Esta vez el enemigo es demasiado grande y puede que se venga con un zarpazo inesperado al final. Tengo sesenta años, ninguna posibilidad de soportar otra caída. Esta sería la última. Si se vuelve a caer la actividad, bajo la cortina para siempre. De rabia no más, porque ya me cansé de vivir soportando el presente. Y no puedo ser tan necia de pensar en el futuro con los años que tengo.

Sin embargo, en algùn lugar de mi corazón está la seguridad de que esta vez ganamos, y de que el futuro se consolida. Si ganamos, me voy a la Plaza de Mayo con una bandera argentina, sea la hora que sea. Y al día siguiente no más, contrato un pintor para dejar como nuevas las paredes del negocio.

¿Qué pasará? ¿Iré de veraneo a la casita alpina? ¿O no volveré a verla nunca más?

Eva Row

15 comentarios:

Anónimo dijo...

Eva:
Es tal cual lo que decís.
También tengo un pequeño negocio, me fundí en 2001 y volví a empezar en 2003. A partir de ese momento fue mejor mes a mes. Durante el conflicto campero se enfrió, pero estos últimos tres meses se empezó a vender otra vez, hay plata en la calle, se nota. Ayer estuve en el Once y en todos los negocios mayoristas había gente comprando. Siempre digo que el Once es un termómetro de la situación del país y en los últimos 20 años nunca me falló el pálpito. Fue emocionante a partir de 2003, volver a ver percheros llenos de ropa yendo y viniendo por la calle Paso, transportados por pibes jóvenes con pinta de recién llegados de los arrabales a trabajar a la Capital.
Yo también voy a festejar, si se aprueba la ley en el Senado.
Muy bueno el blog!
Nunca escribo, más siempre te leo, con el Emperador como música de fondo.
Elisa

caca dijo...

Ojala haya reactivación, te creo.

Un abrazo, Eva, te vas a la casita alpina seguro.

Laura dijo...

Vamos a hacer un asado en la casita alpina, no lo dudes!
Un beso

Jóvenes Cacharienses dijo...

Muy muy bueno. Me gustó.
Sabes que mi experiencia es otra , pero tal vez sirva.
En Marzo/Abril de 2001 entraba a cursar Ciencia Politica en Parque Centenario (Uba) justo cuando RLM se le ocurría hacer un recorte del 30% a las universidades, las FFAA y a todo el estado que le quedara un poquito de "resto", para achicar el déficit.
Recuerdo que mi primera clase en la UNIVERSIDAD fue en la calle, y sería un símbolo de lo que vendría.
Diciembre de aquel año me encontró en la calle (en la quinta de olivos... vivo por allá en BsAa) pidiendo "que se vayan todos Oh Oh Oh!" y con una sensación de desesperanza que no podía entender.
2002 y 2003 fueron años pendulares, que zamora, que Duhalde, que no se que otros nombres...
Recuerdo estar en una charla en la que un tipo que estab detrás mío se levantó y dijo que "mañana (la policia) iba a matar gente en el Puente Pueyrredon porque han intimidado a la gente del MTD". Recvuerlo haberlo mirado sorprendido preguntándome ¿Como puede saber este tipo que alguien va a morir mañana?.
Ese tipo fue el que le dio la piña por la espalda a Francchiotti cuando el "comisario" salía del Hospital ese día...
Ese fue otro hecho que marcó un antes y un después por más que leí aquella tapa de clarin "la crisis se cobró dos nuevas víctimas"... y no terminaba de entender si era verdad lo que pasaba o era un reality show (tan comunes en esos días).
y en el 2003, en una clase de "Teoria Politica Contemporanea" del Profesor García Delgado, mientras trataba de respirar en el bah nicotínico del aula, entró el tipo y dijo algo que me marcó: "cierren los cuadernos y escuchen: hoy cambió la historia argentina".
Era una ridiculez que cursaramos una materia y no pudieramos estar analizando lo que pasaba en la calle. Ese día fue el día en que Menem "se bajó" (renunció a los honores - según él- ) y apareció conformada y tímidamente la figura de ese "tristan" de Santa Cruz.
Le contaba a "Anyuletta" que el día de la asunción, mi abuela dijo algo que también me quedó: "nos va a ir bien"... y la verdad que la abuela no se equivocó.
Hoy ya no está la abuela, pero apareció la esperanza, la posibilidad de soñar en un país más justo, mas equitativo...
Desde 2003 fue todo "para arriba", el peronismo volvió a enamorar. Pero con Cristina, nos puso a prueba a todos... ¿eramos una sociedad de "aplaudidores" o íbamos a bancar la política?.
Creo que el voto del Judas Cleto nos puso frente a LA REALIDAD que no queríamos ver... que hay tipos que tiran para abajo constantemente... y nosotros tenemos que poder volar!.
Cleto, Carrio, Morales... son lastres. Pero todos nosotros tenemos que tonificar las alas para poder volar participando, militando, pensando, escribiendo, opinando, trabajando, cocinando, cosechando, viendo crecer las flores o lo que cada uno de nosotros haga.
"Alta es nuestra consigna y clara la divisa, nuestra causa es la causa del pueblo".

Por eso, a Plaza de Mayo y después a la casita Alpina!!!.

Un gran saludo

Lic. Baleno dijo...

A pesar de los agoreros no pasa nada. Comparado con las cosas que han pasado y lo que pasa en el mundo (veo en TVE como unos obreros españoles apedrean Nissan) aca no pasa nada.
Lo increible es el deseo atroz de muchos de que vayan las cosas mal.

Anónimo dijo...

Eva, Hola

Suspiro hondo!! Quienes pasamos por crisis y la vivimos en carne propia, sabemos de la incertidumbre, de la angustia y de la frustación que s e genera y que se da en lo que vos llamas "soportando el presente" En el 2001-2002 la angustia fue muy grande y la caida sin piso, sin fondo... un tiempo donde cosechamos lo peor... lo que habiamos sembrado como sociedad en los 90, bajo los dislates de los que no pensaron en cada uno de nosotros...

A mi casa la solpló el lobo feroz; la crisis, la recesión, y la desocupación me dejo sin mi auto, y con un cartel de venta en el balcón de mi departamento; con un cartel de venta en el balcón de "MI CASA". En esos años perdí en parte y/o bienes materiales (y con ellos parte de nuestro esfuerzo) pero no perdí la esperanza...
Esa esperanza que hizo apostar al futuro ( y que se sotenia en el amor a la familia y a mi tierra... )
Y hoy, otra vez , esa esperanza me sostiene y me hace también escribir estas notas...

Creo que son posibles los cambios. Eso, si... empiezan por uno!!! El cambio se inicia en los propios actos.
La sociedad, la mayoria de la gente, está acostumbrada a esperar de los demás, a imaginar como actuarian los demás en idénticas o similares situaciones y bajo esa ficción encuentran los argumentos para justificar sus miserias ( que piensan realizar) y desde allí dan un lugar para las ajenas.

El conflcito campo, nos desnudó como sociedad, se cayeron las caretas... y aparecieron en el aire... con las cacerolas y el corte de ruta, las razones, las evidencias, las trazas de porque tuvimos una decada infame en los 90... Nada fue casual. La sociedad si quiere crecer y fortalecer su tejido social, tendría que hacer una revisión de sus creencias, elecciones, actos y ambiciones.

El día que asumió Cristina, almorcé en una pizerria de mi barrio, con una amiga, me senté frente a la tele y disfruté... El mozo de lugar en determinada parte del discurso... resopló y dijo que generaban resentimientos...

En cambio yo me emocioné!! Era un día histórico, para algunos un "día peronista"... para mí un día, más de vida, con renovadas esperanzas...

Siempre recuerdo que, después de la caida, cuando pude volver a concretar algún sueño... un día de esos... llovió y ¿sabes, que?? la lluvia "tenia olor"... tenia olor a VIDA!!

saludos
GAL

Eva Row dijo...

Elisa,
Sí Elisa, acá en el Once hay un termómetro eficaz. Al final de Menem se empezó a caer todo. Los locales bien ubicados que siempre pedían "llave", (pero llaves de 15 a 50 mi dólares), dejaron de pedir llave para alquilarse. Después empezaron a quedar vacíos, hasta que en 2001, tanto en Castelli como en Paso, casi estaban todos vacíos. Nunca había visto algo como eso. El que no conoce el significado de una imagen como esa le pasa despercibido. Toda la vida se peleaban por esos locales.
Gracias por leerme siempre, yo todos los días miro cuánta gente entró al blog y de qué localidad es. Sé que hay muchos que me leen, porque a pesar de no saber quiénes son, se me informa cuánto tiempo estuvieron conectados. Y aunque nunca hagan comentarios, yo veo que vuelven los mismos, de los mismos lugares y pasan un tiempito leyendo. Así que aprovecho para darte las gracias y también a todos los que no comentan, pero están, y yo los siento próximos.
Y ojalá que podamos festejar. Ojalá, Elsa.

Eva Row dijo...

natanael amenábar, gracias, si me voy a la casita alpina, como dice Laura, hacemos un asado con todos mis seguidores y amigos de este blog. Promesa.

Eva Row dijo...

Laura, hace mucho que no nos vemos, promesa lo del asado a fin de febrero si puedo volver a ir. En ese lugar son tan buena gente que te dejan hacer una fiesta si querés. Hay parrilla, hay pileta, sólo que puden ir de a dos invitados juntos y turnarse. ¿Venís Laura?

Eva Row dijo...

Jóvenes Cacharienses,
Gracias, me alegro de que te gustó el post.
Haber empezado la facultad de ese modo, te va a marcar para toda la vida, como a mí haber estado en la facultad de Exactas de la calle Perú el día que se conoce como "la noche de los bastones largos".
Qué divina la abuela, ella sabía. La edad hace sabia a mucha gente en muchas cosas que los jóvenes todavía no ven.
Te mando un beso grande y gracias por anotarte como seguidor!!!

Eva Row dijo...

Gal, gracias en serio, me estás dando un empujón, te lo agradezco tanto. A veces estoy tan sola con mis asuntos. No se los traspaso a mi familia, me los voy comiendo para adentro. Esta confesión que hice en el post, es un pecho abierto a que se vean mis temores y mis resentimientos a una vida llena de piedras en el camino puestas por los distintos gobiernos que nunca nos dieron una situación estable como para llegar a una meta decorosa trabajando.

Me da mucha bronca que personas que no se lo merecen hayan llegado, por saber hacer buenos negocios, a tener una vida tranquila y holgada. Me da mucha bronca que yo le gane por muchas cabezas en mi capacidad profesional a todos los de mi profesión, y los que reciben el mayor caudal de clientela sean los vivillos que saben entrar en los Obras Sociales y hacer convenios no muy transparentes.

Me da bronca por la cuestión de holgura económica. Pero igualmente no puedo quejarme, tengo un mundo de clientes que me siguen y vuelven desde los barrios más remotos.

Pero cuando la economía desciende, todo se va al tacho. Si se siguiera como está ahora, como fue en el 2007, yo no tengo ningún problema y me conformo porque trabajo bastante bien.

¿Sabés Gal? yo amo la lluvia. Un beso grandote.

Eva Row dijo...

Licenciado Baleno, están dando por televisión el "índice de probabilidad" de que entremos en recesión, ya que no pueden decir que estemos en recesión.

Indigna ser testigo de este tipo de manipulación, que se hace para la gente con menos cultura. Y uno se da cuenta de las fuerzas que operan en la política y la ferocidad que ponen en juego.

Juan Carlos K dijo...

A lo largo de toda la historia Argentina siempre hubo una maxima, si el mundo esta en recesion, la Argentina entra en recesion.
Si mucho, si poco, si mas o menos, bueno, dependera del modelo economico, de los precios, de la conyuntura y porque no, de la suerte tambien.
Asi como gran parte del boom 2003-2007 puede ser explicado por una inusal combinacion de factores externos que beneficiaron a los paises latinoamericanos, hay que ver como nos pega esta crisis...

Yo no trabajo en Once, y la verdad, trato de evitar esa zona siempre. Demasiado transito, muy ruidosa. Detesto el centro y ahora que Macri se le dio por romper Corrientes, esta peor todavia.
Yo trabajo en la Industria. Y desde la crisis del campo, todo empezo a caer.
Por lo que veo y los comentarios que recibo, este va a ser el sector mas castigado por la crisis...

Eva Row dijo...

Edu, tenés razón. Las perspectivas son complejas, amén del tema de las AFJP.

ElRuso dijo...

Yo tambien vivo de la industria, mas precisamente de la automotriz, y la verdad que la veo fea.

No creo que vayamos a zafar de la recesión pero esta vez vamos a pelearla para que el costo no recaiga sólo sobre los laburantes.

Comparto con Eva y los amigos que comentan esa conmoción que se produce cuando lo social, lo politico, lo económico atraviesa lo personal. Cuando se comprende que para que a uno le vaya bien, le tiene que ir bien a todos y por lo tanto las soluciones son políticas, no fugas individuales.

Celebro la recuperación de la política como herramienta colectiva de la esperanza.

Me prendo a los festejos!

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