
21 de enero de 2009
Ese nefasto "POST -..."

Una voz hermosa, cálida, un hablar sencillo y llano y suelto, con dejos de la tierra adentro cuando a veces aspira las “eses” a propósito, como para mostrar que viene de Tres Lomas, “la Argentina profunda”, como dice Cristina en esa expresión tan inteligente que suplanta la otra que usé “tierra adentro” o también “el interior”.
A los pocos minutos de escucharlo, Gerardo cuenta la historia de que Mauro Viale echó a todas las organizaciones sociales y a Mate Amargo y muchas otras audiciones de la radio donde es director, porque les había ordenado no tener expresiones de condena contra el Estado de Israel, y por supuesto, no le hicieron caso. Entonces, si no lo sabían, Mauro echó a todo el mundo a la calle, se llevó computadoras donde había informaciones personales de las audiciones, le puso llave a la radio y asunto finiquitado.
Sobre ese asunto nos indignábamos ayer con Roberto. ¿Qué mierda tienen que hacer las Organizaciones Sociales como la de Pérsico con un consabido menemista defensor de la dictadura como Mauro Viale? ¿Qué mugre hay en esa relación incestuosa?
Pero en fin, independientemente de que esa “mala yunta” terminaba mal o mal, Mauro Viale los rajó a todos así de fácil porque seguramente no habría contratos, ni habría ningún tipo de derechos para reclamar de parte de las audiciones. Y yo me pregunto, qué le dieron a Mauro Viale para meter en esa frecuencia a todas las Organizaciones Sociales? ¿Qué le dieron a cambio? ¿Qué le concedieron? ¿Quién es el artista de éste entuerto nefasto?
Gerardo se quejaba de que la noticia no salió en los medios. ¿Raro no?
La cosa es que Gerardo también condenó al Estado de Israel, cosa con la que saben que concuerdo, pero utilizó el término SIONISTA adosado al de Estado, cosa que traté de explicar , y el único que me entendió fue Omix, (que no es poco) que no es más que una infiltración del lenguaje malhabida tanto de los sionistas como de los antisemitas, pero estoy medio sola en esto, y me la banco, mientras la referencia no sea a los “judíos”.
Sepan que a los fanáticos del Estado de Israel, les encanta que les digan a ellos SIONISTAS, que los reconozcan a ellos como SIONISTAS. La batalla del lenguaje, por ahora la ganaron ellos, en fin, y se la regalan los Contreras. En fin, seguiré bregando, con mucha paciencia para arrebatarles el término SIONISTA a los que desde el Estado de Israel no responden a otra patria ni a otro Dios que al Capital.
El asunto es que entre los oyentes se escucharon dos expresiones inconvenientes, que en la Argentina del INADI, en la Argentina de Kirchner impulsor del cambio en la cultura como nunca antes se había visto, son expresiones que no se escuchaban más.
Una mujer hizo una lista de cosas que empezaban con la palabra BASTA. Algo asì como: basta de Imperialismo, basta de…., basta de “judíos”. Y otra dijo: a MauroViale lo condena su apellido.
Yo le mandé un mail a Gerardo, quien gentilmente lo leyó y dijo que él no había escuchado lo de basta de judíos, y que la que dijo que a Mauro Viale lo condenaba el apellido (Goldfarb), había dejado otro mensaje explicando que se refería al apellido “Golfa”, claro la pobre no sabe cómo se escribe y entendió que Mauro Viale se llama Mauro Golfa.
No fui yo sola la que se quejó, hubo dos oyentes más, que tienen en la cultura metido adentro lo ganado por la administración Kirchner y su programa del INADI. Y es bueno saber que muchos no lo tienen todavía metido adentro, sino prendido con alfileres.
¿Cuándo vamos a volver a escuchar hablar loas de la seguridad durante la dictadura? ¿Cuánto falta? ¿Será durante el Post-Kirchnerismo? Seguramente. Trabajemos contra ese Nefasto Post.
Una señora confundida

El 20 de julio de 1969 los astronautas llegaron a la luna. Al día siguiente vino una señora a revelar un rollo 127 de la cámara Kodak Fiesta. Era una camarita elemental, con un rollo de película enorme, que lograba fotos hermosas, todas en foco, y hasta tenía un flash a lamparitas, que permitía sacar fotos de noche. Los rollos que se traían a la mañana, se entregaban a la tarde, ya revelados y con las copias de las fotos.
La señora vino a buscar su rollo. Abrió el sobre y vió que no había salido una sola foto. Su decepción fue enorme, y me preguntó ¿por qué no me salieron las fotos? Es la primera vez que me pasa.
Yo miré los negativos y estaban todos sin imágenes, nada de nada, no había penetrado la luz en ellos. Y la señora volvió a preguntarme ¿por qué no salieron las fotos?
No sé señora, a ver, le dije, ¿sacó de noche? ¿Usó el flash?
Sì, me dijo, siempre uso el flash de noche, y me salen hermosas las fotos.
¿Y qué sacó? Le pregunté.
Le saqué fotos a la Luna, quería tener un recuerdo de los astronautas. Y le juro que usé flash, yo no entiendo por qué no salieron.
Señora, le dije, el flash tiene un alcance de tres metros como mucho, y en lugares cerrados, con paredes que reflejen la luz, o cortinas. Nunca al aire libre.
¡Què lástima me dijo! ¡Y yo que me preocupé tanto! ¡Todo el tiempo tuve miedo de que el flash los asustara y que los astronautas se vinieran para abajo!